Menos mal! - Segunda parte
El articulo nos ofrece algunos consejos sobre como utilizar las técnicas imaginativas para reducir el dolor con la ayuda de un terapeuta experto. |
ALGUNOS EJEMPLOS PARA PONER EN PRACTICA ENSEGUIDA!
- Asumir una posición cómoda, en un lugar tranquilo;
- Relajación;
- Imaginar el acto motriz en condiciones de bienestar psicofísico, pensando en sensaciones placenteras mientras lo esta realizando;
- Imaginar la situación los más real posible, llevándola a un contexto en el cual normalmente se realiza. Cuantos más detalles tenga la imagen más viva y real sera.
- Cuando se advierte una sensación de bienestar general y se piensa que se ha realizado mentalmente el gesto con satisfacción, es posible interrumpir el ejercicio.
- Asumir una posición cómoda, en un lugar tranquilo;
- Relajarse profundamente durante cinco minutos o más si se advierte la necesidad
- Imaginar un lugar seguro que nos de paz y serenidad, en el cuál os sintáis tranquilos, o en un momento de vuestra vida pasada en el cual os habéis sentido particularmente bien y en forma, o de nuevo una música que os proporcione tranquilidad y positividad;
- Visualizaros a vosotros mismos en esas situaciones o mientras escuchéis música;
- Repetir algunas veces estas imagines y luego a vosotros mismos en las imágenes;
- Cuando se habrá convertido en una imagen de confianza y con el estado que la misma os genera, usadla para eliminar el síntoma y repetir el ejercicio hasta cuando no advirtáis la eficacia que reduzca el síntoma.
Entre estas técnicas no es necesario olvidar la relajación muscular progresiva, sobre todo para los miembros inferiores que permite alcanza un buen grado de suportación del dolor.
Como para las otras técnicas, estas técnicas no serán eficaces para todos y, en cualquier caso, también para los que las encuentran eficaces tendrán que entrenarlas con constancia y cotidianamente.