Mejorar el pase, el control, trabajar la orientación del cuerpo, estimular el desmarque, visualizar los espacios que hay que ocupar o liberar son los objetivos que los entrenadores persiguen con sus tareas proponiendo a los jugadores un entrenamiento completo desde el punto de vista técnico, táctico, físico y cognitivo.

"Rondos" contiene en su interior todas estas características; nuestros jugadores estarán bajo una elevada carga cognitiva con el deber constante de leer la situación, elegir una de las posibles soluciones y realizarla de la manera adecuada posible, todo esto con un ingrediente secreto: la intensidad.

Desmentimos sobre todo la idea común de que los rondós corresponden a los antiguos rondós en los cuales dieciséis jugadores en circulo se pasan el balón estando parados con uno o dos compañeros en el centro que intentan interceptar el pase; en realidad los rondós modernos son tareas de posesión de balón que, gracias a los espacios reducidos y a la altísima velocidad del balón, permiten al entrenador estimular a los jugadores en muchos puntos de vista, iniciando por el aspecto técnico de cada jugador hasta llegar a la táctica que les permitirá colaborar con los compañeros.